Te escribo esta carta para recordar a Alice…a la cual añoro más de lo que te puedas imaginar.
¿Cómo
escribir en un trozo de papel un sentimiento?
Se mejor que nadie que es lo más difícil que alguien pueda hacer , tantas veces lo intente, pero ninguna de esas veces triunfo del todo ya que la gran mayoría leían sin ver lo que ponía, sin sentir el significado de cada palabra… Es difícil describir un sentimiento y aún más uno tan grande como es el ¡AMOR!
Se mejor que nadie que es lo más difícil que alguien pueda hacer , tantas veces lo intente, pero ninguna de esas veces triunfo del todo ya que la gran mayoría leían sin ver lo que ponía, sin sentir el significado de cada palabra… Es difícil describir un sentimiento y aún más uno tan grande como es el ¡AMOR!
Pero tal vez
si todos entendiéramos el significado de ``AMAR´´
no haríamos tanto daño aunque no fuera intencionadamente.
No se cómo
comenzar esta historia pero sumándose un año más quiero hablarte de ella… Alice
mi hermana mayor y su dolor por aquel chico tan cruel que la dejo sin vida
cuando yo aún era demasiado pequeña como para darme cuenta de lo que pasaba,
pero aun así sé que ella vuelve a vivir aunque solo sea en este día tan triste
para nosotros, aunque su recuerdo este en unas tristes palabras sin vida…
Ella aún era demasiado joven como para salir
con chicos las dos lo sabíamos pero estaba tan feliz que no podía hacer otra
cosa que apoyarla y ayudarla en todo. Yo
presenciaba sus salidas, su dolor, cada llanto... o al menos eso creía, pero no
veía las marcas en sus muñecas, tal vez ella era demasiado buena ocultándolas o
yo demasiado pequeña para fijarme en esos pequeños detalles y cuando me di
cuenta…ya era demasiado tarde siento entretenerte tanto pero ahora empiezo a
contarte esa historia que al principio te dije.
Todo empezó
una tarde de verano, ella estaba jugando conmigo mientras ese nuevo y
misterioso chico recién llegado de Estados Unidos se acercó a nosotras y se
puso a hablar con Alice, él era alto moreno de piel, ojos azules y profundos
como el más extenso océano, iba de negro y tenía un corte de pelo muy diferente
a los chicos de mi barrio, parecía tan…interesante y a la vez tan aterrador,
cada vez que lo veía me entraban escalofríos, aun desconocía el nombre de ese
chico tan misterioso y que decir de Alice era la chica más dulce que conocía,
siempre iba de rosa y le sentaba tan bien, a veces recordaba a esas muñecas de
porcelana con las que tanto me gustaba jugar cuando era pequeña, Alice era
alta, su piel más blanca que la nieve, sus ojos oscuros y llenos de vida,
siempre estaba feliz, hasta que llego él, Alice cambio tanto por Cameron que ni
siquiera nuestros padres pudieron reconocerla, pero aun así ella seguía
confiando en mi puede que menos que antes no lo sé, pero cuando podía intentaba
ayudarla en lo que podía con tal de que fuera feliz yo presenciaba siempre sus
discusiones y Cameron siempre iba tan serio que incluso a nuestros padres les
daba miedo, pero ella lo quería tanto que no podía vivir sin él. No entendía
¿Por qué le quería tanto? Los días pasaban y se volvían cada vez más
inseparables, pero Alice nunca dejó de escribir sus pensamientos en eso viejos
diarios que hace poco me atreví a leer
cuyo contenido no me gusto para nada, las palabras escritas estaban llenas
de miedo, de rencor, incluso de… ¡ODIO! Dos
o tres de esos diarios contenían poemas suicidas que da miedo incluso
recordarlos, en esos versos se notaba que pedía a gritos que alguien la ayudara
pero nadie se fijó jamás en ella tanto como para entender lo que pretendía
hacer y ayudarla.
Cameron había
jugado con ella en mil ocasiones, la había engañado, herido sus sentimientos,
Alice le perdono tantas veces que ni ella podía creerlo ni yo al leer sus
diarios y al ver lo mucho que ese ser tan cruel le había hecho, él la humillo tanto que la llevo al suicidio. Que
me pregunto ¿Acaso no merecía vivir? ¿Los príncipes azules existen? Y mil
preguntas más que sin respuesta se quedan.
La pregunta
que recorre mi mente y más me preocupa es… ¿mi destino será como el de Alice?
¿Tal vez yo si encuentre a ese príncipe azul, Que tanto añoro? ¿A lo mejor mi
destino era ayudarla y no me di cuenta? Sé que no tengo la respuesta a estas
preguntas y tal vez nunca tenga la respuesta. Pero lo que realmente me gustaría
es volver a verla sonreír como solía hacer antes, me gustaría que discutiera
conmigo una vez más por tocar sus pinturas, que nos peleemos por tonterías, que
me cuente sus más oscuros secretos y yo le cuente los míos, llorar junto a ella
y pedirle consejo.
¡Sé que es
estúpido! Pero me gustaría poder contarle a alguien lo que pasa por mi mente,
por mi corazón sin tener miedo a nada ni a nadie, poder gritar y que alguien me
ayude, que alguien me coja la mano, que me abrace cuando lo necesite.
Siento
agobiarte con estas palabras pero alguien debía saber lo mal que me siento sin
Alice ya que mis padres no me escuchan desde aquel día tan trágico en el que la
encontraron en la bañera con esos cortes tan profundos en las muñecas y ahora
cada uno vive en su casa con su nueva familia en su mundo, y de mi ni se acuerdan no ven que pido a
gritos que alguien me ayude, que fue a mí a quien más le dolió la perdida de
Alice ya que ella era mi hermana mayor, se suponía que tenía que ser mi
maestra, mi ejemplo a seguir, pero no tuve esa suerte… y lo siento mucho y te
diría que fue de Cameron pero realmente no sé qué paso con él, desde el día en
el que Alice decidió dejarnos él se marchó y no volví a saber nada de él nunca
más.
Firmado: tu fiel seguidora